lunes, 31 de agosto de 2015

INFRACCIÓN

Infringimos hasta la ley de la amistad
por un intento de amar, un delincuente inconsciente,
e hicimos del presente futuros por llegar,
pero nada llegará por el ansia inconsistente.
Los verbos apasionados se van a la deriva,
ellos se nos iban con tristeza y desagrado,
los antes enamorados, ahora prohibidas
las caricias advertidas, los abrazos ya cobrados.
Y desde este desde ayer yo no me acostumbro
a ir dando tumbos sin sabor ni placer,
lo que todo pudo ser se vuelca en otro mundo
mientras, yo moribundo, lo imaginaré.

BAJO MÍ

Bajo mí hay un yo enhebrado en guerras perdidas,
una eterna sombra de hechos pasados no ocurridos,
deseándolos como un cachorro en el pecho materno,
e incontables secuencias de estrellas sin forma,
de un fino hilo yo pendo como una apuesta trágica,
desvirtuando el espacio que emanan los días,
la oferta provocadora de otro pacto inmortal
y la fatalidad de la maldita rueda de las horas.
Junto a mí vive alguien que agota mi sangre,
y no maldice en balde, mi tiempo es el suyo,
me ahogo en su presencia de mar arrogante,
donde desemboco como en él las negras gotas.
Bajo mí hay un yo enhebrado en guerras perdidas,
un camino movible hacia ninguna parte,
una lluvia miscible con las sombras de la tarde
y una noche solitaria donde acaba mi historia.

miércoles, 26 de agosto de 2015

AQUELLA VEZ

Te devuelvo mi poema y los mil problemas,
te devuelvo aquel beso que no sabía a eso,
las dosis de abrazos pagados a plazos,
y la mirada expectante, y el adelante,
te devuelvo los secretos ya abiertos,
los paseos imaginados y nunca dados,
de tus labios la humedad que supiste cuidar,
y tu perfil perfecto para no recuerdo qué proyecto.
Te devuelvo las noches con sus broches,
las madrugadas por la cama,
los revestimientos de los sentimientos,
tu orden de las cosas como una sola cosa.
Te devuelvo tu desprecio al no poner precio,
el alma entregada no a cambio de nada,
el sinuoso camino recto por desatinos,
y el palacio de diamantes con manual por delante.
Te devuelvo el tiempo de tus des tiempos,
y el des tiempo de tus tiempos,
y tus ojos como flores de ambiguos colores,
tu aurea orgullosa, tus fugas diarias,
tu plantilla sectaria, y tus voces en prosa,
tus reconfortantes victorias, tus canciones,
tus admirables misiones, tu escasa memoria.
Te devuelvo el prestigio, el lugar apropiado,
el rincón arropado, y la calidez de tu brisa,
tu libertad irreprochable, tus gestos amables,
pero no te devolveré de mi corazón el sable
clavado, aquella vez, por aquella sonrisa.

viernes, 21 de agosto de 2015

ESCASOS MINUTOS

Leí una vez, no hace más de tres horas, que si pudieras lograr hacer volver, aunque fueran escasos minutos, a alguien que ya se fue para siempre, ¿por quien te decidirías? Como no es tema fácil para requerir una respuesta inmediata, me tomé justamente eso, unas tres horas.
Uno piensa, casi de inmediato, en un familiar cercano, un padre, una madre, un hermano. También se le ocurre, por esclarecer alguna fobia, en la primera novia. O aquel que una vez tanto jugó contigo, un amigo.
Más, después de tres horas, sin querer más demora, decidí verme otra vez a mí. Aquel que una vez fue y se fue. Que era yo pero de otra manera, sin tanto historial en la cartera. Con trece años por ejemplo, pues si así lo viera, viera de paso padre, madre, hermano, novia y amigo. Le diría -que tal amigo- él no me reconocería,  salvo algún perfil de roce, impotente a discernir su propio futuro y su desembocadura tras tantos años. Es de prever su cara de extraño. Algo le vuelca a irse. Más, atrapado por mis escasos minutos contratados, no puede. No sabe porque no puede pero sabe que no puede. ¿Pegaría decirle ¡hola yo!? No malgastaré el tiempo en analizar una provocación por querer solo experimentar. Solo espero que al despertar algo de él me haya traído, y recolocarlo en alguna parte de mi ser, donde lo había perdido. Yo he llegado a través de esos trece años. Sí también otros años, pero elegí trece. Entonces la vida parecían mucho más que trece años, igual que ahora, la vida no parece que dure más de trece años. Antes uno contaba años, ahora segundos de placer que quiero atrapar, reservar, y mimar. Al final, todo quedó en una mutua mirada curiosa, durante escasos minutos. Después nos desvanecimos, él siguió su camino, y yo, sin él saberlo, le seguí.

domingo, 16 de agosto de 2015

EL TRÁNSITO

Estoy delante del ordenador
pensando qué escribir,
mientras, en la tele
echan una peli americana,
es decir, norteamericana,o
tú ya me entiendes
aunque yo no lo entienda bien,
el reloj, sobre la mesa,
marca las once menos cinco,
un estuche de cedés al lado,
un cuaderno y un rotula,
pienso, mientras,
si las hormigas
se están comiendo mi bizcocho,
lo tengo puesto al revés,
por la parte quemada,
negra como una batalla sin causa.
Charlan dos, se despiden, y siguen.
La historia no tiene interés
en los próximos tres minutos.

Tengo que limpiar esto de costumbres,
de quehaceres cotidianos,
a veces cruzo los dedos
pensando en nada, o sea, en todo.
Me ayudará un cigarrillo
a meditar sobre la mejora de las cosas,
no creo, es una costumbre más,
somos gente de costumbres,
nos acostumbramos incluso
a lo que se pone de moda,
imagina, pues, que somos muy costumbristas,
el radicalismo se aparta por contra oferta,
son cuestiones de paciencias
encerradas herméticamente
en el fondo de algún alma,
la mía, sirva de ejemplo,
se enuncia como auto deformante,
¡que pesada la mosca
y su amante!
decía que maldecía este día sin alegría,
decía que iba a la deriva,
buscando un asiento de metro
para cedérselo a nadie, que nadie venía.

Y así pasó este día anodino
del que me acordaré para siempre
como tránsito hacia alguien
de quien no sé nada.



jueves, 6 de agosto de 2015

martes, 4 de agosto de 2015

EL RECUERDO


VOLVERTE A QUERER

Lluvia a la tierra, bendita lluvia,
que lavas cultivos y erosionas la sierra,
que limpias mi cara como si te lo pidiera,
cuando caíste mi alma voló,
soñé que con ella iba un deseo,
posarle los besos a una cara morena,
llegar mis desvelos para que supiera
hasta donde llegaba mi querer,
y al secarse la piel, avara lluvia,
el alma apagaste y quedaron las penas,
mis desvelos, mis besos que ya no llegan
por tu cruel desaparición,
pero has de saber que mi empeño prosigue,
que tu agua robé y mis ojos se llenan
de lágrimas que de nuevo me llevan
a volar a ti y volverte a querer.

DIME

Dime el nombre
de cada flor,
en cada una
estás tú,
con cada una
sueño yo.

lunes, 3 de agosto de 2015

OTRA VEZ TÚ

Y otra vez tú, como una caída periódica y densa,
otra vez la nueva empresa de reconocerte,
otra vez tenerte y no tenerte, como un oleaje,
y pagar otro peaje para no llegar a ningún sitio,

de nuevo el principio de un círculo vicioso,
de nuevo un hermoso engaño de flor extenuante,
otra vez todo adelante sabiendo que no existe la meta,
y de nuevo esta inquieta incertidumbre que tengo,

ya no sé si lo que obtengo es satisfacción o frustrarme,
pero estoy dispuesto a quemarme en cada minuto,
el mundo y el tiempo tan diminuto como una gota,
no sacia, aunque brota, las manos que extiendes,

otra vez tú no me comprendes y eso lo entiendo,
yo siempre voy surgiendo como surgen los albas,
y en estas extrañas palabras de nuevo te digo
que otra vez yo bendigo tu constante llegada.