Podemos mover los espacios y llevarlos a otro lugar,
podemos cada día volver a darle cuerda al reloj,
podemos reiniciar el mismo camino miles de veces,
podemos expresar todos los propósitos de enmiendas,
no podemos con el alma del que ya se fue,
no hay un adios después del último adios,
no hay cartas de amor para quien nunca llega,
la explicación compleja mata el corazón,
podemos rememorar las viejas callejas,
podemos pasear por parques llenos de soledad,
podemos regalarnos libros de ensayo,
podemos hablar de los fallos de la libertad,
no podemos sin los ojos nada explicar,
no hay perdones en las noches angustiosas,
no hay razones para no decir que eres hermosa,
no hay peor daño que no querer amar,
podemos decir ¡basta ya! ¡no sigo por aquí!
podemos decir ¡basta ya! ¡ todo tiene un fin!
podemos gritar y gritar, y decir y decir,
podemos no decir nada y esperar y esperar,
no podemos estar siempre esperando la lluvia,
no podemos permanecer en la eterna tristeza,
no podemos explicarnos conpereza,
la vida siempre es una confusión,
podemos pulir las esquinas cuadradas,
podemos olvidar las farolas solitarias,
podemos perder todas las memorias,
sabemos huir de locuras despiadadas,
no podemos mostrar lo que nunca tenemos,
no podemos decir si todo es verdad,
no sabemos si los mensajes hacen prisioneros,
no sabemos nada de a dónde llegar,
pero podemos decir aquello que sentimos,
pero podemos unir palabras separadas,
pero podemos buscar en el fondo del alma
que extraña estrategia nos hace vivir.
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